El nuevo coronavirus SARS-CoV-2, que produce la enfermedad conocida como Covid-19, mantiene en vilo al mundo entero. Europa, con las fronteras cerradas y millones de ciudadanos confinados en sus casas, se ha convertido en el foco principal del brote, que se originó en China a finales de diciembre, pero el continente americano teme ser la siguiente víctima por la rápida extensión de los contagios en EE.UU. Hasta ahora han muerto más de 24.000 personas, la mitad en Italia y España, y hay más de 534.000 casos confirmados en todo el mundo.